Lo iba a incluir en la entrada de este mes de la Plaza de Correos, pero vale la pena ponerlo en una aparte.
En la acera norte de la plaza hay una serie de edificios, casi todos del mismo tipo, con balcones de forja.
Hay un par o tres de excepciones, una de ellas el que tenía en el primer piso la Sastrería Pardo, en su tiempo, una de las de referencia en Alicante.
Hace bastante tiempo que cerró, pero sigue el rótulo de la fachada, con un estilo inconfundible.
Parece que el edificio está a punto de ser restaurado o derribado. No se si se encuentra protegido de alguna manera o si tiene algún valor histórico o artístico, pero me gusta el contraste de las líneas rectas y sencillas de la fachada con esos cuatro elementos que parecen soportar los miradores.
A ver si aguanta.